Tómate un día libre. Relájate. Respira. Recárguese. La isla de Marin es una gran puerta familiar para recargar energías. Disfrute del paisaje montañoso, del tempestuoso río Chemal, del aire más puro, lleno de aceites esenciales y sabores de hierba; del wall terrencourt por rutas especialmente diseñadas, de la escalada de montañas, del senderismo escandinavo... para los amantes de los paseos activos.
También puede jugar al baloncesto, voleibol, fútbol o bádminton. En invierno, pista de patinaje sobre hielo y hockey para todos; dé un paseo en bicicleta; o simplemente relájese en una de las tumbonas de las terrazas y disfrute de unas vistas increíbles.